miércoles, mayo 10, 2006

Breves apuntes biográficos familiares del sr. Rodríguez

Remover a los muertos está feo. Pero dado que le gusta tanto sacar el tema a nuestro presidente, ampliemos las miras.

Ya sabemos la historia del abuelo, pero,

¿Que fue de la pobre viuda?

Imaginaros la situación.

Con un niño pequeño, viuda de un militar republicano juzgado en consejo de guerra, condenado a muerte y ejecutado.

Y todo esto, permaneciendo en su ciudad, en medio de la represión y el hambre de la postguerra.
Los que tengáis familiares que lo vivieron y os hayan contado sus historias entenderéis que no parece la mejor situación para salir adelante.

Pues la buena mujer, resulta que dio estudios superiores a su hijo (el papá de Zapatero). Que raro ¿no? Y además en una ciudad distinta a la de residencia: Valladolid. Cuanto gasto. Los que tengáis edad similar a ZP, sabréis por vuestros padres que no era normal ni mucho menos ir a la Universidad.

Pues el papá de ZP no solo estudió Derecho, sino que desarrolló una brillante carrera como abogado en León, teniendo como clientes a lo mejor de la sociedad leonesa y llegando a ser decano del Colegio de Abogados. Para ser el hijo de una viuda represaliada no está mal.
Vamos, que ZP perdió a su abuelo, como muchos españoles. Pero la cosa le fue a su familia bastante mejor que a muchas otras incluso en el bando vencedor.

Curioso, verdad. ¿Como se las apañaría la abuela viuda? En León cuentan algunas historias al respecto. Debieron ayudarla algunos miembros de una sociedad a la que pertenecía el abuelo. Pertenencia, por cierto, no necesariamente hereditaria, pero sí posiblemente.

Y llegamos a nuestro héroe quien siguiendo los pasos de papá, también fue a la Universidad, pero, ahora sí, en León.Tras los 7 u 8 añitos que necesitó para acabar la carrera de Derecho (tampoco era buen estudiante), intentó sacarse una oposición de profe para seguir en la facultad. La oposición la suspendió, pero gracias a los buenos oficios de su papá (decano de los abogados leoneses, recordemos) consiguió una plaza de ayudante que le permitía sacarse un dinerillo impartiendo clases sueltas.

En paralelo, su fulgurante carrera política le había permitido ir ascendiendo puestos en el partido de modo que fue elegido diputado por primera vez con 26 años, abandonando la docencia por otro puesto (por no llamarlo trabajo) sin duda mejor remunerado. Como diputado, nunca tuvo cargos de responsabilidad. En los 13 años de gobierno felipista no fue ni ministro (por supuesto), ni secretario de estado, ni siquiera ningún cargo autonómico menor.

Es decir, su primer puesto con responsabilidad de gestión ha sido el de presidente del gobierno. Se nota ¿no?

Por otra parte, como todo el mundo, además de familia paterna, nuestro héroe también tiene mamá (ya fallecida) y familia materna. De esa familia, a pesar de usar el apellido como marca para el marketing (recordemos, Rodriguez el papá y el abuelito; Zapatero, la mamá), nuestro hombre habla mucho menos.

Habiamos dejado al papá de Zapatero (perdón, de Rodríguez) estudiando en Valladolid. Precisamente allí conoció a la mamá de Zapatero, donde ésta vivía con su familia. Tras acabar la carrera y casarse, la pareja se estableció en León. Pero resulta que el otro abuelo de Zapatero era médico pediatra, por eso, pese a vivir en León, la mamá de Zapatero se fue a Valladolid justo antes de nacer éste para ser atendida por su papá y algún colega suyo.

Por cierto, el otro abuelo de Zapatero (el médico Zapatero) y, sobre todo su abuela, eran de derechas. De hecho, un hermano de la mamá de Zapatero (también ya fallecido) fue consejero de la junta de Castilla y León por el PP. De la madre de Zapatero desconozco la filiación.

Vamos, como en cualquier familia española normal. Unos de acá y otros de allá. Bueno, normal del todo, no. En pocas hay un elemento tan rencoroso y que fomente los odios a base de remover a los muertos como Zapatero.

2 Comments:

Blogger Germánico said...

Después de repasar desesperado su árbol genealógico, buscando ansiosamente algo a lo que agarrarse, dio con su abuelito, al que ni conoció. Dijo: "Este, este es el mío".

Su abuelito, que participó en la "represión" de la Revolución del 34 en defensa de esa República entonces de derechas.

9:44 a. m., junio 16, 2006  
Blogger Ijon Tichy said...

Parece ser que, en la educación política (condicionamiento podríamos decir) del pequeño ZP, pesó mucho más el papá que la mamá.

!Menudo machista el papá!

Bienvenido Germánico

10:06 a. m., junio 16, 2006  

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